No pudo ser. Hubo lágrimas, abrazos y emociones este Jueves Santo en los Salesianos. La lluvia y hasta el granizo que habían caído por la tarde en Pozoblanco eran un adelanto de lo que esperaba para la noche. La Cofradía Salesiana del Santísimo Cristo del Perdón y Nuestra Señora de la Amargura se tuvo que quedar en los Salesianos. Otro año más, sin salir a la calle.
Luego la Banda Municipal de Música de Pozoblanco tocó una marcha -Amargura Salesiana- al paso del palio de la Virgen y la Banda de Cornetas y Tambores de la Cofradía tocó otra marcha para el paso del Cristo del Perdón. Con estas marchas, se produjeron las levantás y al menos por unos pasos dentro de la iglesia, los costaleros y costaleras fueron los pies de sus titulares. Siguió otra marcha y la real puso el colofón. Luego se abrió la puerta y muchas personas entraron. Seguía lloviendo.
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